No hay un rio más famoso y transitado en todo el norte de España. Nace en la vertiente leonesa de los Picos de Europa, en el municipio de Oseja de Sajambre, pero vierte al Cántabrico trás un accidentado recorrido de 66km. Corto y salmonero, como mandan los cánones. Su descenso internacional, competición deportiva más importante del calendario piragüista mundial, probablemente, la fiesta más colorista y divertida del norte peninsular después de los san fermines en Pamplona. Miles de aficionados se acercan hasta Arriondas el primer sábado de Agosto dispuestos a disfrutar del espectáculo deportivo y del descenso popular, además de la música, las comidas campestres y la sidra que forman parte de esta FIESTA DE INTERÉS TURÍSTICO INTERNACIONAL. Son casi 20km de recorrido entre la playa fluvial de Arriondas y la meta, en la desembocadura de la ría de Ribadesella. Un itinerario reservado por un día sólo a los palistas profesionales que los asistentes pueden seguir desde las orillas del cauce y a borde del tren fluvial. Palistas a los que luego emular durante el popular descenso o cualquier otra fecha del año.

 En el año 1991 se creó la primera empresa especializada en el descenso del sella. A día de hoy cerca de una treintena de empresas de turismo activo ofrecen la posibilidad de realizar el descenso en diversos tramos entre Arriondas y Llovio, unos 16km en total, lo que convierte a este río en el cauce más paleado del país. El verano es la mejor época para disfrutar del turismo activo en el río, una actividad divertida que no requiere de una condición física especial. Todavía en otoño el cauce del río baja con poco agua lo que facilita en gran medida salvar las corrrientes y rabiones sin necesidad de exhibir mucha pericia.

 En la temporada estival con llevar traje de baño, camiseta, crema solar y unas zapatillas adecuadas es más que suficiente. También existe la posibilidad de disponer de un neopreno. El precio incluye la entrega de un bidón estanco donde el piragüista puede guardar ropa, cámara de fotos, móviles y cualquier otra cosa y la recogida posterior en el punto de destino con el traslado hasta la base en Arriondas ( donde se dispone de instalaciones con duchas ).

 La mayoría de las rutas comienzan  aguas abajo del puente que por la N-664 cruza el Sella y entra en el casco urbano de Arriondas. En la explanada los monitores explican las técnicas de remo y los piragüistas se colocan el chaleco salvavidas para comenzar la travesía: el primer rápido surge a medio km del puente, en la Raíz. La corriente se abre en dos ramales y el consejo de los monitores es tomar el de la derecha, dejando al costado una pequeña playa fluvial. Medio km más adelante se entra por otro rápido en el coto de pesca de la Remolina. En su orilla izquierda hay una plataforma de madera para los pescadores: hay que conducir la piragua por el centro del rabión para salir del rápido con éxito. Antes de llegar a bodé las canoas alcanzan el coto de Ricao: la corriente es larga y desemboca en el tramo de aguas mansas con las embarcaciones pegadas a la orilla izquierda frente a la caseta del guardarriós.

 A la altura de Triongo el Sella recibe las aportaciones de tres pequeños afluentes: El Parda, La Güelga y el Fuente. Y la travesía pasa bajo la pasarela de Llaos .Traspasada la pasarela el cauce hace un codo hacia la derecha y afronta el paso del Espigón de Triongo con uno de los rápidos más exigentes del recorrido. Luego supera por la derecha otra isla y llega hasta la pasarela de Fuentes dejando a la izquierda otra pequeña playa fluvial. un km después el agua se remansa llegando al Pozo del Arco, con una profundidad poza, área de descanso de las canoas. El Picu la Vieya es una zona con tres rápidos de corrientes y contracorrientes: el consejo es agrontarlos por el centro para evitar vuelcos. Luego se llega a Toraño, punto intermedio del recorrido: se recomienda aprovechar y hacer un alto a la altura del puente, en la orilla derecha, para descansar y reponer fuerzas ( con el bocadillo o la fruta que se incluye en el pic-nic que facilitan las empresas multiaventura ).

 Un par de km aguas abajo la canoa llega al paraje del rabión del Diablu,la segunda de las zonas que exigen mayor habilidad ( aunque sin demasiado problema ) ya que hay que superar el rápido entre grandes piedras: lo mejor es afrontar su paso por el lado del centro y la izquierda, siguiendo la corriente y evitando los vuelcos ( aunque la profundidad no supera el metro y medio ). Entre Viña y Llordón el trazado de la N-634 se asoma a un recodo del Sella : es la zona conocida como La Requexada, con otra de las pozas más profundas del cauce. Y pasado Llordón se alcanza la pasarela de la Uña, uno de los puntos donde concluyen las excursiones por el Sella algunas de las empresas de turismo activo. A partir de aquí el agua se va remansando y hay que hacer un mayor esfuerzo ( quedan unos 3km para el final 9. Antes de Fríes hay un último estrechamiento del cauce por la proximidad de la Sierra de La Escapada y la Corona´l Castiellu. Luego se alcanza la pasarela de Cuevas y, tras superar el meandro que deja a la derecha a Omedina, llega al último punto con dificultad del trayecto: la antigua presa de Santianes. Se trata de un estrechamiento entre rocas que hay que intentar salvar entrando por la parte del ferrocarril, en Llovio, punto final del descenso y comienzo de la Ría de Ribadesella.

Si te vienes a Asturias ven y disfruta del río Sella !!